7 aventuras para tu viaje a Arizona

A un kilómetro bajo el borde del Grand Canyon, las cinco cataratas del Havasu Canyon son de un increíble tono azul verdoso. Esta es una de las aventuras al aire libre más increíble de Estados Unidos. Ya sea que decidas caminar, montar a caballo o tomar un helicóptero para llegar a las cataratas, el extenuante viaje de 13 kilómetros entre la Hualapai Hilltop (colina Hualapai) y el agua te obliga a apreciar las espectaculares vistas que te esperan. Al llegar al cañón, un camino de tierra te llevará sobre dos puentes pequeños que debes cruzar para llegar a pozos para nadar de color turquesa y cascadas de hasta 60 metros de altura.

Por lo menos durante los últimos 800 años, la tribu Havasupai, “People of the Blue-Green Waters” ("El pueblo de las aguas azul verdoso"), ha vivido aquí y cuidado de las cataratas y de las tierras circundantes. Cuando vayas de visita, ten en cuenta que este no es un simple destino turístico, sino que es un lugar fundamental para la identidad de los havasupai.

Prescott, un pueblo del norte de Arizona, se ha esforzado al máximo para convertirse en un destino de primer nivel para los ciclistas de montaña. El pueblo tiene más de 400 kilómetros de senderos que van desde sencillas pistas de novatos hasta pistas difíciles, accidentadas y escabrosas. Cada abril, la escena del ciclismo de montaña se hace presente en la Whiskey Off-Road, una carrera de resistencia de tres días de duración y un evento que incluye toneladas de música en vivo y, tal como lo sospechaste, whisky.

La variedad de caminos y senderos es lo que hace que Prescott sea tan atractivo para los ciclistas. En un área relativamente pequeña, puedes recorrer una suave ladera en descenso, pedalear a campo traviesa o explorar una ladera técnica. Los Willow Dells Slickrock Trails (senderos Willow Dells Slickrock) son unos de los más desafiantes y gratificantes, puesto que trazan un circuito alrededor de los místicos Granite Dells, una serie de afloramientos de granito que sobresalen de la tierra como castillos. Temprano en las mañanas y en la tarde, las tranquilas aguas de Willow Creek reflejan los montículos, lo cual se suma a la sensación de surrealismo.

La única forma de disfrutar realmente el Grand Canyon es navegando a través de él. Durante los últimos seis millones de años, el Colorado River (río Colorado) ha estado ocupado erosionando el cañón hasta darle su magnífica forma actual y, por extensión, creó una de las rutas de rápidos más épicas que puedan encontrarse.

Los rápidos de Grand Canyon anteceden la moderna escala de clasificación Clase VI, así que este es uno de los pocos lugares en el mundo en el que técnicamente puedes ver rápidos Clase 10. Crystal y Lava Falls, dos de los rápidos más agresivos del Colorado, pueden clasificarse como tales dependiendo de las condiciones del agua. Pero, independientemente de la época en la que vayas y de qué sección recorras, vivirás el ajetreo y la emoción dignos de los mejores parques de diversiones, y verás los paisajes que solo se pueden apreciar en Arizona.

Durante la tarde, los enormes afloramientos en Sedona adoptan un tono rojizo tan intenso y digno de ser contemplado que parecen antenas gigantes que emiten señales a los New Agers que acuden en masa de todas partes del mundo para admirarlos.

Como gran parte de Arizona, Sedona es un lugar que guarda muy bien sus secretos. Desde la carretera se pueden apreciar muchas vistas hermosas, pero cuando tienes un vehículo todoterreno y un guía experimentado, se abre todo un mundo nuevo. Para complacer a todos los gustos, existen varias empresas que ofrecen recorridos en jeep a ubicaciones remotas entre las piedras rojas. Los viajes duran normalmente de dos a tres horas y te llevarán a descubrir extensas vistas del desierto y de las ruinas de las viviendas de los antiguos pueblos nativos de Estados Unidos.

Los recorridos en globo aerostático operan en todo el estado, pero la oportunidad de ver desde el cielo el Sonoran Desert (desierto de Sonora), en el sur de Arizona, hace que los recorridos en las áreas de Phoenix y Tucson sean especialmente atractivos. Empieza temprano en la mañana para que puedas admirar uno de los amaneceres más impresionantes del planeta. Cuando el sol haya salido completamente, no despegues tus ojos del suelo para que puedas avistar antílopes americanos, coyotes y pecaríes.

Si con el globo aerostático no subiste lo suficiente, entonces sube a un avión. Gracias al cálido clima y al cielo despejado de Arizona, el estado ha desarrollado una gran escena de paracaidismo. Paracaidistas expertos vienen desde Europa para realizar saltos en el desierto, en diferentes lugares entre Tucson y Phoenix. Si realizas un salto en tándem por primera vez o eres un veterano de los aires, el paracaidismo en Arizona te brindará la mayor descarga de adrenalina.

Un rancho vacacional en Arizona ofrece tanto aventuras al aire libre aptas para toda la familia, como las comodidades que se pueden encontrar en un complejo turístico con todo incluido. Generalmente, los ranchos ofrecen recorridos guiados a caballo por los alrededores y, dependiendo del rancho, puedes arrear una manada poco colaboradora, hacer una excursión por el desierto o, incluso, jugar golf en un campo de clase mundial. Por las tardes sirven abundantes cenas y después puedes mirar las estrellas. Disfrutarás la naturaleza del suroeste como nunca antes lo habías hecho.