Delta del Mississippi: lugar de nacimiento del blues

Gateway to the Blues Visitors’ Center and Museum de Tunica en la autopista del blues fue el punto de partida perfecto para conocer la historia general del nacimiento del blues.

Entre las exposiciones había una de una colección de guitarras utilizadas por músicos famosos, como la corneta de W. C. Handy’s. Aprendí todo sobre el estilo del blues británico, o "skiffle", que surgió en el Reino Unido durante la década de 1950, y que bandas como los Rolling Stones y Cream han jugado un rol monumental en mantener vivo el género del blues.

Probé mi habilidad para tocar una lap steel guitar y un arco de diddley, e hice un lamentable intento de grabar mi propia canción de blues en el estudio. Me la envié por correo electrónico y creo que permanecerá ahí en mi bandeja de entrada por siempre.

Después de comerme una hamburguesa increíble para el almuerzo en la estación de servicio convertida en restaurante Blue and White, me dirigí al Tunica River Park and Museum (Parque del Río y Museo Tunica) donde aprendí sobre la rica flora y fauna autóctona del Delta. El museo tiene una excelente vista del Mississippi River (río Mississippi), que no deja de ser impresionante, aunque esté cargado de lodo.

Esa noche cené en The Hollywood Café, un bar sencillo llamado así en honor a un pueblo de Mississippi, no por la famosa ciudad de California. Inmortalizada para siempre en la canción de Marc Cohn "Walking in Memphis", esta parte de Hollywood, junto con sus deliciosos tomates verdes fritos, seguirá siendo parte de la ruta del blues de Mississippi por tiempo indefinido.

A la mañana siguiente, fui a Greenwood, donde se encuentran los restos de Robert Johnson, un legendario músico de blues, que se dice que vendió su alma al diablo a cambio de tener éxito como guitarrista de blues. La modesta tumba que se encuentra en la iglesia remota de Mount Zion es uno de los tres lugares donde se cree que está enterrado Johnson. Mientras estaba parada frente a la lápida, varios turistas llegaron para dar sus respetos, tres de los cuales eran ingleses.

"Me siento como en la Meca", dijo uno. Puso una pequeña botella de whisky junto a otras que formaban una fila. Robert Plant llegó aquí en el 2009 porque Johnson le causó una muy buena impresión durante su juventud e, incluso, Eric Clapton llamó a Johnson el "cantante de blues más importante de la historia".

Mi siguiente parada fue el B.B. King Museum and Delta Interpretive Center (Museo y Centro de Interpretación del Delta B.B. King) en Indianola. Construido en honor a la vida y el legado de quien probablemente sea el músico de blues más famoso de la historia, el museo fue genial. Podría haberme quedado allí fácilmente varias horas más para aprender bien todo.

Para cenar, paré en Doe's Eat Place en Greenville y conocí a "Lil Charles", cuyo abuelo abrió el restaurante en 1941. Cuando llegué, saludé a algunos lugareños que, muy amablemente, me preguntaron si quería acompañarlos para la cena. Lisa dijo, “No esperes nada sofisticado aquí, pero sí una maravillosa cocina sureña al estilo clásico”. Tenía razón, aunque intenté sin éxito de hacer caber en mi estómago un filete del tamaño de un campo de fútbol americano, acompañado por frijoles asados, tamales calientes y ensalada.

Terminé mi día en el Walnut Street Blues Bar y bajé todo lo que había comido con una cerveza Southern Pecan fabricada en Mississippi mientras escuchaba blues en vivo.

No hay otro lugar en el mundo como el Delta del Mississippi. Me pareció mágico y misterioso, y repleto del gran encanto sureño.