En las Islas Doradas encontrarán playas y hoteles consentidores

Iniciamos nuestro viaje en un una verdadera gema en el The Sea Island Resort. El hermoso edificio de The Cloister, aunque majestuoso, también es cálido y confortable. Los entusiastas del deporte pueden disfrutar del Cloister Tennis Center y tres campos de golf de campeonato en el Sea Island Golf Club. 

Adicionalmente, les recomiendo que visiten el Club de playa de Sea Island, con 8 kilómetros de playa, piscinas frente al mar y un sinfín de divertidas actividades incluyendo surf de remo, kayak y velero.

Visitamos el grandioso Jekyll Island Club Hotel. ¡Toda una institución! Esta propiedad histórica fundada en 1886, fue uno de los clubs más exclusivos frecuentado por personalidades de la elite como William Rockefeller y Joseph Pulitzer, ahora ésta arquitectura Victoriana está abierta al público.

La isla, llena de hermosos paisajes escénicos y muchos edificios históricos, también incluye una variedad de distintivas playas y campos de golf.  Los visitantes pueden caminar por el Distrito Histórico o unirse a las excursiones guiadas  para visitar las millonarias casas de campo mientras los huéspedes del hotel pueden disfrutar del croquet, caballos, tenis y renta de bicicletas.

No es extraño encontrarse artistas pintando verdaderas obras de arte en los jardines con el hotel como musa posando. 

En el extremo norte de la isla, llegamos al lugar que esperaba visitar con ansias, la playa Driftwood. Acepto que cuando escuché que encontraría corteza y ramas regadas de árboles de todos los tamaños, me llenó de curiosidad ¿Cómo podría eso ser atractivo? Pues efectivamente resultó para mí una experiencia única. Si usara todavía cámaras de esas con rollos, ya me hubiera terminado un par. El lugar es excelente para fotos, bodas o simplemente para relajarse. 

La ciudad playera de St. Simons ofrece una gran variedad de actividades y atracciones turísticas para toda la familia. Una de las más populares es el Pier Village, una zona colorida llena de restaurantes y pintorescas tiendas con un muelle de pesca a espaldas del faro de St. Simmons.

No quería que se terminara el viaje; la historia y la cultura de las Islas Doradas de Georgia son tan enriquecedoras, que me hubiera gustado explorar unos días más. Con hermosas playas arenosas, un pintoresco encanto, y una ideal temperatura moderada, las Islas Doradas son las vacaciones en familia perfectas en cualquier época del año.