Música folk y de montaña en Carolina del Norte

El Charlotte Douglas International Airport es el mejor punto de partida para tu recorrido hacia Asheville, un viaje de dos horas hacia el oeste. Esta relajada ciudad en las montañas es conocida por la famosa Baltimore Estate (Finca Baltimore), las cervezas artesanales, la gastronomía desde la granja a la mesa y su arte único; pero también rockea, puntea, improvisa y marca el ritmo durante las noches, toda la semana, especialmente en el centro. En ciertos días, verás grupos de espectadores zapateando, aglomerados alrededor de alguno de los muchos músicos callejeros, los cuales tocan todo tipo de música, desde bluegrass y jazz hasta zydeco y rock de montaña. En el verano, la escena musical se acelera con círculos de tambores semanales en el Pritchard Park (Parque Pritchard) y la popular serie de conciertos de bluegrass llamada Shindig on the Green. Comúnmente elegido como uno de los favoritos del oeste de Carolina del Norte (y designado uno de los cinco principales escenarios por la Rolling Stone en 2008), el Orange Peel ha albergado a incontables artistas, desde Bob Dylan a los Beastie Boys, en este íntimo espacio interior. Robert Moog, pionero de la música electrónica e inventor del sintetizador Moog, vivió en Asheville durante 30 años. En la Moog Music Factory (Fábrica de Moog Music) puedes participar en un recorrido gratuito para ver y tocar los instrumentos que se están fabricando antes de adentrarte en las montañas.

Este pueblo pequeño es un destino perfecto para los ciclistas de montaña y, además, cuenta con más de 40 bodegas a una hora de distancia en auto. Pero la característica más destacada es que rebosa de un espíritu apalache y de música folk. Los famosos Kruger Brothers (hermanos Kruger), músicos de folk y bluegrass, hicieron del condado de Wilkes su hogar, por lo que es probable que te encuentres con su música y otros sonidos similares en cualquier lugar donde vayas. El Blue Ridge Music Hall of Fame (Salón de la Fama de la Música de Blue Ridge), ubicado en el Wilkes Heritage Museum (Museo Patrimonial de Wilkes), invita a músicos nacionales y locales, luthiers (fabricantes de instrumentos de cuerdas), bailarines y otros artistas al mundo de la música de montaña. Asegúrate de pasar por el resto del museo, especialmente por la Old Wilkes Jail (antigua cárcel de Wilkes), de cerca de 1859, donde fue encarcelado el soldado confederado Tom Dula (Dooley). Posteriormente, lo conmemoraron en la canción de folk "Tom Dooley", que se hizo famosa gracias al Kingston Trio en 1958. Sin duda, Wilkesboro es más conocido por el MerleFest (en honor a Doc y Merle Watson), que se celebra cada año a fines de abril. Con un reparto de artistas "tradicionales y más" (música apalache tradicional, más cualquier cosa que suene bien), el MerleFest se ha convertido en uno de los mejores festivales de música del país.

Muy cerca del límite de Carolina del Norte con Virginia, el encantador pueblo de Mount Airy resultó ser la cuna de Andy Griffith. Un paseo por el centro es como pasear por un Mayberry de la vida real. También puedes recorrer el Andy Griffith Museum (Museo Andy Griffith) y tomarte una foto con la estatua de bronce del exterior. Pero estás aquí por la música, y el condado de Surry es admirado por ser un refugio para violinistas, banjistas y otros músicos apalaches tradicionales. Visita el histórico Earle Theatre (Teatro Earle), un bastión de la música de antaño. En el Earle se realiza el show de radio en vivo conocido como Merry-Go-Round, el segundo más largo en período de actividad, después del Grand Ole Opry. También se realizan sesiones de improvisación con músicos locales los días jueves y sábados. Estas sesiones son animadas e intensas, con una increíble cantidad de trabajo en equipo musical que es muy apreciado por quienes gustan de marcar el ritmo con sus pies y por los bailarines. En el primer fin de semana de junio, la música inunda las montañas con la Bluegrass and Old-Time Fiddlers Convention (convención de bluegrass y violinistas de todos los tiempos). Durante el verano, relájate con una silla de jardín y un refrigerador para disfrutar de la música en vivo en el Blackmon Amphitheatre (Anfiteatro Blackmon) en el centro.

Ve hacia las montañas para tu siguiente parada en Chapel Hill. Aquí suceden muchas cosas, por lo que es el mejor sitio para terminar tu viaje. Chapel Hill está dominado por la universidad estatal con el mismo nombre, y la atmósfera es joven, divertida y sureña. Ve a la popular Franklin Street para oír a los músicos callejeros mientras recorres las tiendas y los bares locales. A medida que el sol se esconde, West Franklin cobra vida con el entretenimiento. Visita el bar más antiguo de la ciudad, The Cave, un bar por excelencia con increíbles música y bebidas. En Local 506, contempla a músicos locales y en gira en un pequeño escenario. En el pueblo vecino de Carrboro, Cat’s Cradle alberga una variedad de bandas de rock en un entretenido escenario con capacidad para 750 personas, mientras que el Arts Center (Centro Artístico) contiguo alberga conciertos, obras y monólogos humorísticos. Antes de partir, asegúrate de pasar por el pueblito de Hillsborough hacia el norte, o pasa un rato en Mystery Brewing para deleitarte con una dosis de cervezas artesanales y música en vivo. Asegúrate de tener una buena lista de reproducción antes de partir desde el Raleigh-Durham International, a solo 30 minutos desde Chapel Hill.